Durante el reinado de Amenhotep II se produjo el Éxodo del pueblo hebreo de la tierra de Egipto y el posterior nacimiento de la nación de Israel. Testigo de excepción será Nebi, escriba del faraón. Frente a la corrupción y el despilfarro de Amenhotep II, Moisés reclama, en nombre de un hambriento pueblo de Israel, una sola cosa: poder venerar a un dios único. A partir de ahí, los acontecimientos se precipitarán.